OPINION
El pasado dia 6 se celebró en el estadio Xunteiro el derby entre
el santiagués Deportivo Feijóo y el olívico Abel Sporting. Partido muy
esperado ya que dichos equipos hacía varias temporadas que no coincidían
en un terreno de juego.
El equipo vigués a pesar de jugar fuera de casa se encontraba con la
moral muy alta, debido a los últimos resultados, por lo que se plantó
sobre la cancha con gran seguridad en sí mismo. El equipo local no
estaba acostumbrado a jugar contra un rival tan correoso, pero afrontó
el encuentro con ganas de jugar un buen fútbol y hacer las delicias del
respetable.
Los visitantes comenzaron pronto a atacar por las alas anotando
rápidamente el tanto del Area Metropolitana. El equipo local quedó
ligeramente desnortado por momentos, pero pronto se recuperó al alcanzar
la meta visitante con los temas del Hospital y el aeropuerto de
Peinador. Con este resultado de 2-1 llegamos al descanso.
En la 2ª parte los vigueses salieron dispuestos a comerse a su rival y
a los pocos minutos empataron el encuentro con la Ciudad de la
Justicia. El match estaba empatado pero se sabía que ese no sería el
resultado final.
A partir del minuto 15 el Abel Sporting continuó con su juego
agresivo (sin ser violento) y cercó continuamente el área local. Gracias
a estos ataques los visitantes consiguieron su tercer tanto con la
Estación Intermodal.
El encuentro siguió siendo muy disputado pero en los últimos minutos
los vigueses marcaron dos nuevos tantos con la construcción de dos
nuevos túneles y de la cesión del Lagares, finalizando el partido con el
resultado de 2-5.
Al final los dos capitanes se dieron la mano en señal de deportividad
y quedaron emplazados para un próximo encuentro, esta vez en la ciudad
olívica.
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