PALACIO DE LOS MARQUESES DE VALLADARES

PATRIMONIO DE VIGO
 
 
Es un solar único en el Casco Vello vigués desde el punto de vista arqueológico, apuntan los expertos consultados por este periódico para referirse al pazo de los marqueses de Valladares, situado en el 2-4 de la calle Oliva. Una empresa ha comprado este inmueble en ruinas para su deconstrucción, es decir, para proceder al vaciado interno con el objeto de iniciar más adelante algún proyecto inmobiliario.
 
La Dirección Xeral de Patrimonio exigió la realización de una excavación en área, que es el nivel máximo de exigencia en materia arqueológica, y solo se decreta cuando hay indicios importantes de contener información del pasado. La empresa ya presentó el proyecto de la excavación, y ya ha sido autorizado por los técnicos de la Consellería de Cultura. Esta operación no se realizará hasta que concluya el vaciado del edificio.
 
 

 
 
En el año 2008 se realizaron en el solar unos sondeos, cuyos resultados fueron los que marcaron la decisión actual. El lugar donde se encuentra el edificio está rodeado de calles que ya han sido exploradas por arqueólogos con resultados muy buenos. En la calle Xuanelo y en A Laxe salieron restos romanos y medievales en muy buen estado de conservación durante sendos controles dirigidos por el arqueólogo Ángel Acuña.
 
Los expertos consultados por La Voz señalan que en el Casco Vello apenas quedan restos arqueológicos debido a las sucesivas construcciones realizadas a lo largo de los siglos, y a la presencia de roca muy cerca de la superficie. «Quienes querían construir no les quedaba otra que arrasar la construcción anterior», apunta un arqueólogo.
 
Los restos localizados en Xuanelo, que es la calle con la que limita el inmueble por el norte, se correspondían con los últimos momentos de presencia romana en la zona, así como también hay un pavimento medieval. En A Laxe se localizaron los restos de la muralla viguesa y por debajo materiales romanos muy desmantelados.
 
Edificio protegido
 
El inmueble también está protegido por el Plan Especial de Reforma Interior del Casco Vello. Los promotores de la obra, en un futuro, deberán proteger las fachadas de piedra, las carpinterías de madera, el portal, las galerías, los jardines y el patio, los balcones y barandillas y el muro de cierre de la parcela. El edificio es descrito como un palacio urbano del siglo XIX.
 
Jorge Lamas. La Voz de Galicia
 
 

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